“Soy demasiado perfeccionista y ser modelo me ha ayudado a fluir”



Entablar una conversación con Blanca Padilla (Collado Villalba, 1995), una de las modelos españolas más cotizadas la actualidad, debería despertar cierto nerviosismo. No obstante, en cuanto la madrileña entra en la habitación solo siento paz. Al principio pienso que es el hecho de que tengamos casi la misma edad lo que nos hace conectar más rápido, pero lo cierto es que Blanca transmite una serenidad y una entereza solo propia de quien se conoce y está en calma con sí mismo.

La modelo nos recibe en lo alto del Hotel Sofia en Barcelona, desde donde una gran cristalera nos regala las mejores vistas de la Ciudad Condal. En unas pocas horas, Blanca desfilará en el esperado show de Pronovias, que pone el broche de oro a la semana de la moda nupcial. Compartirá pasarela con Sara Sampaio, con quien ya ha coincidido en numerosas ocasiones en el pasado y lo hará ante la atenta mirada de una veintena de celebrities internacionales, como Ed Westwick, Sassa de Osma o Eliza y Amelia Spencer, que no han querido perderse el desfile de la firma.

La modelo, que además se ha prometido hace poco, nos cuenta que le encantan los dos vestidos que llevará en el desfile (de momento un secreto bien guardado) a pesar de que se trata de dos estilos completamente diferentes. También nos habla de sostenibilidad, una parte importante de su carrera y vida ahora mismo, así como de salud mental y los cambios más reseñables que ha vivido de la mano de la industria de la moda:

barcelona, spain april 21 blanca padilla and sara sampaio walks the runway during the pronovias show as part of the barcelona bridal week 2023 on april 21, 2023 in barcelona, spain photo by estropgetty images

Estrop//Getty Images

A pesar de tener tan solo 28 años, ya llevas una trayectoria de 10 años sobre las pasarelas. En este tiempo, ¿Qué es lo más importante que te ha enseñado el mundo del modelaje?

Soy una persona que siempre busca cómo controlar y organizar. Entonces creo que la vida me ha dado esta profesión para poder dejar ir todo ese control. Es como un aprendizaje continuo, porque es una profesión en la que no tienes control sobre las cosas. Pones todo de tu parte y trabajas para conseguir lo mejor, tanto tú como tu equipo, pero el resultado es imposible de controlar. Diría que mi mayor aprendizaje es ese, dejarme fluir, algo que también intento aplicar en mi vida diaria porque desde pequeña he sido demasiado perfeccionista.

Obviamente también he aprendido que siempre hay que dar todo de ti y para eso también es necesario cuidarse a una misma. Es como el otro gran aprendizaje ¿Cómo vas a dar tu 100% si no te cuidas a ti? Esos mis dos grandes pilares: por un lado, aprender a aceptar lo que viene y, por otro lado, el autocuidado.

También has bajado el ritmo de desfiles y actualmente seleccionas mucho más sus trabajos, ¿Qué nos puedes contar de esta decisión, cómo la tomaste y cómo la estás viviendo?

Creo que el COVID reorganizó un poco nuestras vidas sin quererlo y de alguna forma cada uno ha priorizado distintas cosas. En mi caso tuve que escoger, de hecho estaba trabajando en Barcelona para Pronovias y fue ahí cuando sucedió el punto de inflexión de escoger si me volvía a Estados Unidos o me quedaba aquí.

Yo tenía toda mi vida en Estados Unidos, mi apartamento con absolutamente todo durante ocho años. Al final en un momento así te quedas donde está tu familia, donde está tu gente y es lo que hice. Ahora estoy un poco entre los dos sitios, pero aquel momento nos enseñó mucho a reorganizar prioridades en ese sentido. Para mí fue como esa reevaluación de mi vida porque estaba trabajando a un ritmo muy intenso, vivía en un constante jetlag y, al final, ahora hay un ritmo de trabajo bueno, pero estoy más tranquila en el sentido de que priorizo también otras cosas.

Hablando precisamente sobre prioridades: castings, desfiles, muchos viajes… el trabajo como modelo puede ser muy demandante a nivel físico. En tu caso, apuestas por un estilo de vida y una alimentación muy equilibrada pero, ¿Qué haces en el día a día para cuidar de tu salud mental?

He aprendido que todo lo que tenemos en la cabeza afecta nuestro cuerpo de una forma u otra. Voy a empezar a estudiar un curso muy importante para mí, sobre Ayurveda y Health Coaching. Siempre lo he tenido en mente, ni por el título ni para dedicarme profesionalmente a ello, sino porque está muy relacionado con cómo vivo la vida y cómo la combino con la moda. En relación a eso, intento aplicar esos principios en mi vida diaria. En una vida tan agitada donde a menudo me falta tiempo para dormir y no siempre tengo control sobre los alimentos a los que puedo acceder, es muy importante buscar ese equilibrio. Para mí, a veces parece imposible alcanzarlo, ya que siempre es una búsqueda constante y nunca llegas. Sin embargo, trato de acercarme lo máximo posible a través de mis elecciones diarias.

Todo lo que tienes en mente afecta tu cuerpo y viceversa. Es fundamental prestar atención a tus pensamientos hacia ti mismo, tu mundo, tu profesión y otras personas. Las comparaciones y otros aspectos en la moda a menudo pueden hacerte sentir mal, por eso es importante centrarte en ti mismo, hacer un trabajo personal y cuidar tus pensamientos y cómo te hablas a ti mismo. Creo que esto es clave, y a través de esto se refleja todo lo que haces en tu vida: qué pones en tu cuerpo, qué alimentos consumes, qué pensamientos albergas. Es importante cuidarte tanto física como espiritual o mentalmente.

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Siguiendo esta línea, bien es sabido que la industria de la moda es una de las más polémicas en materia de salud mental y, en tu caso, has hablado en el pasado de ciertas experiencias que viviste en tus comienzos y te sorprendieron. En los últimos años, cada vez hay más concienciación sobre la salud mental, ¿Has notado también este cambio entre tus compañeras de profesión y en la industria?

Creo que volvemos al mismo punto. El momento del COVID fue un punto de inflexión para las modelos, en particular, ya que nos permitió obtener perspectiva. Siempre cuento la siguiente analogía: cuando estás en la rueda del hámster, estás corriendo sin parar y no ves lo que realmente está sucediendo. Pero de repente, te detienes, das un paso atrás y observas desde afuera el ritmo frenético en el que estabas inmersa día tras día. Es una experiencia maravillosa y estamos agradecidas por nuestro trabajo, siempre lo estaremos. Sin embargo, al verlo desde fuera, te das cuenta de que quizás necesitas hacer una pausa, equilibrarte y reevaluar. Creo que eso es lo que la pandemia también nos brindó. Por eso, pongo ese ejemplo, porque fue nuestra oportunidad de detenernos un poco.

Sé que fue un período muy difícil, pero años después todavía lo traigo al presente porque creo que nos ayudó de alguna manera a poner las cosas en perspectiva. Ahora trabajamos de una manera diferente, más desde casa, priorizando diferentes aspectos. En el caso de las modelos, fue una oportunidad para seguir buscando lo mejor y darlo todo por nuestra carrera, pero también tener esa perspectiva desde afuera y saber qué queremos en cada momento, decir “no” cuando sea necesario. Es como ponerme a mí misma en primer lugar y tener criterio.

Actualmente está muy candente el debate sobre las y los ‘nepo babies’ sobre las pasarelas. Tú eres prácticamente lo contrario, ¿Cómo vives este debate y qué diferencias ves entre las modelos llamémosles tradicionales y las celebrities sobre la pasarela?

Hay que fluir con los tiempos, hay que fluir con lo que viene. Yo lo único que llevo muy mal son las injusticias. En cuanto a lo que se le exige a una persona o a otra. Es un tema en el que me metí hace años y en el que se me se me malinterpretó totalmente, pero en cuanto a los nepo babies no veo nada controvertido, porque yo creo que es fluir con lo que viene y con los tiempos. De la misma forma que en los 90 o los 80 eran otras cosas, ahora es esto. Está fuera de mi control hacia dónde va la industria, pero yo puedo focalizarme en mi carrera y yo puedo hacer lo que está en mi mano.

Es también una señal de que la industria se está abriendo a cosas nuevas, ahora todo el mundo es bienvenido y me parece perfecto. Creo que se necesitaba eso también. Vamos a abrir la mente, vamos a fluir y luego sobre todo focalizarse en lo de una misma. Ya sabemos que esto cada vez de una manera, si echamos la vista atrás, todo ha cambiado, el canon de belleza, las modelos…

shanghai, china november 20 blanca padilla walks the runway at the 2017 victorias secret fashion show in shanghai show at mercedes benz arena on november 20, 2017 in shanghai, china photo by victor virgilegamma rapho via getty images

Blanca Padilla ha sido la única española en desfilar en dos ocasiones para Victoria’s Secret.

Victor Virgile//Getty Images

Precisamente, relacionado con esto, quería preguntarte sobre los cambios más reseñables que has notado en la moda desde que comenzaste a desfilar

He visto cambios muy fuertes, lo que se ha buscado en las modelos ha cambiado muchísimo. Creo que lo más importante sin duda ha sido el cambio del mundo digital, porque cuando yo empecé justo me pilló y estoy agradecida con eso. Eso sí, en aquel momento Instagram no era lo que es a día de hoy, entonces pude vivir esos primeros años en los que estaba en segundo plano, nadie le prestaba atención, yo no subía nada. Ahora parece que ocupa todo, como si no hubiera nada más. También los cánones de belleza han cambiado mucho, pues al principio pedían modelos súper delgadas, luego no, va cambiando mucho. Ahora creo que se busca más belleza clásica, más andrógina.

El mundo del modelaje y las redes sociales confluyen ya y apenas hay modelo que no cuide su perfil en Instagram. En tu caso, hemos visto también numerosos contenidos de moda, alimentación, deporte… ¿Cómo vives esta doble faceta de creadora de contenido, si así lo consideras, y modelo?

Yo sí me considero (influencer), porque al final creo que cualquier persona que tenga una presencia mínima en redes ya está influyendo de alguna forma. Pero lo llevo bien. Lo que pasa es que es complicado, porque es difícil salirse de ese canon de modelo para ser considerada creadora de contenido. Siento que hay una fina línea, pero al final soy las dos cosas. Es curioso, a mí personalmente me encanta. Me gusta porque más allá de estar detrás de una cámara, puedes crear cosas. Puedes unirte a equipos geniales que te gusten para hacer cosas propias o transmitir mensajes importantes. O dejar huella de una forma distinta, más allá de tu trabajo, pero siempre teniendo en cuenta también la esfera de la moda. Es como una puerta a la creatividad también, un medio de expresión. Lo que pasa es que hay que equilibrar las horas que pasas en ello. Todo esto porque consume mucho tiempo. Y si te dedicas solo a eso, sí. Pero al final tengo mi carrera como mi enfoque principal, por lo que hay un poco de balance.

Las redes, eso sí, son una puerta abierta a leer todo tipo de de comentarios y también comparaciones. ¿Cómo gestionas esto?

Intento solamente seguir a las cuentas que me aportan algo, porque al final siempre digo que lo que tú sigues es lo que te está alimentando día a día. Sigo muchas cuentas de diseño de interiores, de artistas, de marcas pequeñitas o sostenibles, activistas o gente interesante de la moda o del arte. También me gustan mucho las cuentas de mindfulness, de salud mental y alimentación saludable. Todo lo que consumo en redes son cosas que a mí me gustan y luego moda, por supuesto. Me tomo las redes como un board de inspiración para que me sume en vez de restarme, quiero abrir mi feed y ver cosas positivas y que me aportan, lo de seguir a gente por compromiso lo llevo muy mal.

En tu caso, llevas muchos años muy implicada con la sostenibilidad. Y no eres la única. Otras top models como Amber Valleta también lo están. ¿Crees que trabajar en la moda os hace más conscientes de la importancia de cuidar el planeta

Sí, yo creo que precisamente estando en esta industria es cuando más te conciencias, porque realmente es cuando ves la barbaridad que hay detrás. Así fue en mi caso al menos. La moda es una de las industrias más contaminantes del mundo, por lo que trabajar en ella te abre los ojos y generas más interés inevitablemente.

De repente conoces marcas que están más comprometidas y te das cuenta que hay otra forma de hacer las cosas. Estas cosas de repente te abren los ojos y dices: ¿por qué lo estamos haciendo tan mal? Yo creo que estando dentro de la moda es precisamente cuando más te puedes asustar y llevar las manos a la cabeza y decir “madre mía, esto tiene que cambiar” y creo que es lo que le ha pasado a gente como Amber o a mí.

¿Dirías que te ha afectado a la hora de aceptar o rechazar proyectos?

Sí. Siempre intento, y cada vez más, que esté todo más alineado. Obviamente es difícil porque hay una fina línea y muchas veces la gente critica ciertas cosas de este trabajo y es como bueno, ¿y tú en tu industria o en tu trabajo estás seguro de que no estás afectando de forma negativa? Al final todo tiene una cara A y una cara B, es muy fácil señalar porque a ver, lo que está claro que es indiscutible es que la industria de la moda es muy contaminante.

También es muy importante saber que a nivel individual no tienes el cambio absoluto, pero eso no significa que te puedas desentender y hacer el loco. Yo intento buscar mi equilibrio entre lo que es mi trabajo y mi forma de vida, además de los proyectos que escojo en base a mis valores. Es verdad que como digo, es complicado porque no tengo la llave de todas las marcas, pero intento, digamos, aunar los esfuerzos hacia un mismo lugar. Como consumidores también tenemos un poder de decisión muy importante. Lo que tú consumes es un voto que le das a esa marca. Para mí todo lo que no sea apoyar el cambio es hacernos daño a nosotros mismos. Eso es lo que quiero que la gente entienda. Nos va a repercutir, nos creemos superiores a todo, pero es que te estás dañando a ti mismo porque somos la naturaleza. Al final es una cadena.

venice, italy september 02 editors note image has been converted to black and white blanca padilla is seen during the 79th venice international film festival on september 02, 2022 in venice, italy photo by jacopo raulegetty images

Jacopo Raule//Getty Images

Y como consumidora, ¿Cómo has cambiado lo que vistes y compras?

Hay muchas marcas que me mandan giftings y siempre intento que eso sea también enfocado a lo que te digo. Yo como compradora hace que no compro cosas muchísimo tiempo. Los bolsos que tengo son muchos vintage o regalos de marcas, pero casi todo es de segunda mano. Además, me parece súper divertido buscar cosas especiales y también intento comprar mucho en negocio pequeño, entender de dónde viene el material.

También me fijo en la composición y trato de comprar prendas que sean 100% algodón, 100% lino, para darles una segunda vida es importante que no tengan tejidos mezclados, ya que es muy difícil separarlo para reciclar. También trato de construir un armario con muchos básicos buenos que puedas combinar y que no necesites cambiar tu armario cada mes.

Volviendo a tu carrera, de todos los desfiles que has realizado, ¿Nos puedes contar uno que de verdad guardes con especial emoción?

Siempre digo el mismo. Pero el último que hizo Riccardo Tisci para Givenchy 2017, fue súper especial, pero por la energía que hubo allí en la sala, era una pasada. A la gente le encantaba lo que él hacía para la marca, entonces fue como una despedida súper bonita y no me lo esperaba que me fuese a dar el último look de su último desfile. Nunca me había pasado el emocionarme tanto caminando porque wow… La ovación hacia él en la sala era especial y muy emocionante. Si te gusta la moda, ese desfile fue único.

paris, france january 20 model blanca padilla walks the runway during the givenchy menswear fallwinter 2017 2018 show as part of paris fashion week on january 20, 2017 in paris, france photo by stephane cardinale corbiscorbis via getty images

Stephane Cardinale – Corbis//Getty Images

Estás a punto de desfilar para Pronovias en un momento muy especial, ya que te has prometido hace unos pocos meses ¿Cómo estás viviendo la organización de la boda?

Pues muy bien, con calma, porque no teníamos ninguna prisa, la verdad. Llevo ocho años con mi pareja y hasta que nos hemos prometido pues ha pasado tiempo porque hemos tenido relación a distancia, no teníamos prisa ninguna y ahora que estamos prometidos.

Respecto al vestido, tengo mil inspiraciones en la cabeza, estoy intentando centrar todo, pero todavía no tengo definido el concepto. Queda justamente un poco más de un año ahora, entonces todavía tengo un poco de tiempo.

Relacionado con con el desfile de Pronovias, ¿Vives diferente estas pasarelas nupciales comparadas con las pasarelas tradicionales?

Sí, es muy diferente porque al final las novias es todo como más mágico, más dreamy, gira más alrededor del concepto de belleza pura, de romanticismo. Otros desfiles dependen más del diseñador, del concepto, lo que busquen. Cambia muchísimo de uno a otro. En novias siempre suele ser el mismo concepto, como eso de de como bonito, mágico y siempre es un poco como esa. Te metes un poco en una nube.



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