Descubre la firma de moda de Orio que te fascinará

Sostenibilidad y emprendimiento en clave «joven» vuelven a unirse para crear una firma cargada de valores y estilo. En esta ocasión, nos trasladamos hasta la localidad costera de Orio para conocer de cerca a tres amigas que, hace poco más de un año, apostaron por unir sus fuerzas y sacar una nueva firma de moda adelante. Ellas son María Arruti, Estela Atorrasagasti y Goiuri Unanue. Juntas forman Lama The Lab, un espacio en el que la creatividad es el pilar fundamental de su modelo de negocio.

«Somos amigas desde que tenemos uso de razón y después de la pandemia todas buscamos emprender y crear algo propio. Así es cómo nació Lama The Lab», desvelan las creadoras. Un espacio constituido por una diseñadora, una comunicadora y una ingeniera que siempre han creído que podrían formar un ‘dream team’ triunfador. Por ello, después de que el mundo se parase por la pandemia, apostaron por seguir la inquietud de crear un espacio único en el que vender productos cargados de detalles.

Por lo tanto, las tres fundaron la firma hace menos de un año con un objetivo claro: crear moda original y sostenible. Este último punto se está convirtiendo en uno de los principales motores de la moda guipuzcoana. Ellas mismas reconocen que la «sostenibilidad es la clave para producir moda, pero siempre hay campo de mejora». Para comenzar a reflejar esta cuestión, cabe destacar que todas las prendas las diseñan ellas mismas, los tejidos son reciclados y reciclables, y la confección, estampación y bordado corren a cargo de empresas estatales.

Siguiendo este parámetro, una de las claves principales de la sostenibilidad es la producción limitada, sin seguir los patrones actuales que marcan un camino hacia la producción de cuatro colecciones al año, generando sobreproducción de prendas y aumentando los residuos textiles. «Nuestra idea es lanzar una colección de piezas básicas que se puedan combinar con otras prendas del armario», subrayan.

De hecho, la primera colección que lanzaron el pasado año estaba compuesta por camisetas, camisas, sudaderas, faldas, pañuelos de seda, ‘tote bags’ y coleteros. Todas estas piezas están inspiradas en el folklore vasco, concretamente en la danza.

«El reflejo del baile en la colección ‘Dantza’ se puede percibir de distintas formas. Por una parte, en el patronaje. Cada pieza parte de la deconstrucción de algún traje original de la euskal dantza, de fotos antiguas que hemos ido recopilando o de trajes que hemos ido utilizando durante nuestro paso como bailarinas», desvelan las creadoras.

La fluidez de los tejidos es clave para representar esta cuestión, ya que los tejidos con caída, agradables y naturales fueron el punto de partida para elaborar esta colección, además de los cortes al biés o el punto de elastano que les permitió crear prendas holgadas que les acompañasen durante el día a día.

La cultura euskaldun y la creatividad como seña de identidad

El nombre de la firma no es casualidad y es que estas tres «oriotarras», además de que sus prendas embeben de inspiración euskaldun, querían que el propio nombre llevase parte de esa esencia. «Tras una larga búsqueda, optamos por ‘lama’. En iparralde emplean esta palabra para referirse a los aspectos acogedores y cálidos de una casa. Esto es lo que buscamos con cada una de nuestras piezas: goxotasuna», resaltan las diseñadoras.

A pesar de que la marca está en su primer año de vida, la fundaron con el objetivo de ir más allá de la moda, creando experiencias enfocadas en la importancia de la artesanía y la cultura de grupo. «En la segunda parte del nombre de la firma seleccionamos la palabra ‘the lab’ para que fuera algo así como una laboratorio de ideas en el que juntarnos con distintos perfiles y realizar encuentros o colaboraciones», concluyen.