¿Hay una forma de beber alcohol sin subir de peso o arruinar por completo tu dieta? Un artículo publicado en 2015 en la revista científica Current Obesity Reports, que aborda el tema del consumo de alcohol y cómo está asociado a la ganancia de peso, menciona un punto importante en su introducción. “Basados en el hecho de que 1 gramo de alcohol aporta 7.1 kcal (o lo que son 29 kJ) y los estudios muestran que la energía consumida en forma de alcohol se suma a la de otras fuentes dietéticas, una mayor ingesta de energía con el consumo de alcohol ciertamente puede promover un equilibrio energético positivo y en definitiva, el aumento del peso”.
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Cuando bebes alcohol leve o moderadamente, según lo que dice la evidencia, no tendría por qué ser un problema o un factor de riesgo para que esto te haga subir de peso tanto como para entrar en un rango de sobrepeso o, peor aún, de obesidad; pero el consumo de alcohol en exceso, si se ha relacionado más a un aumento de la adiposidad en el cuerpo, es decir, la acumulación de masa grasa.
De hecho, el sitio Better Health Channel explica que el alcohol te puede hacer ganar peso por 4 razones principales:
- Frena al cuerpo de la quema de grasa.
- Es alto en aporte energético (calorías).
- Puede aumentar tu apetito o hambre y disminuye la saciedad.
- Te induce a comer más alimentos procesados como los salados o ricos en grasa.
No todo está escrito en piedra y como muchas de las investigaciones lo muestran, aunque el alcohol podría ocasionarte que subas de peso, tampoco esto quiere decir que lo anterior no se pueda evitar.
Para comenzar, he aquí los factores que ellos revelan que debes contemplar cuando bebes alcohol y tratas de cuidar tu peso:
Tu conducta respecto al alcohol
¿Beber alcohol aumenta tu peso?
Tus hábitos de fiesta o de beber alcohol que se pueden traducir en ganancia de peso, tienen mucho que ver con tu respuesta a las siguientes preguntas:
¿Qué tanto bebes alcohol? ¿Qué tan seguido lo haces? ¿Qué es lo que bebes? y hasta ¿qué comes cuando bebes?
Tus propios factores de riesgo:
Es decir, tu genética, tu género, tu edad, tu forma de alimentarte o dieta habitual, tu nivel de actividad física o hasta tu condición de salud o enfermedad.
Consejos de los expertos para beber alcohol y evitar ganar peso
Aplica estos tips
Bebe leve a moderadamente
La cantidad es muy importante, es por ello que los expertos aunque te dirán que no es lo más idóneo, no tienes por qué eliminarlo completamente pero sí beberlo al menos con moderación. En mujeres no más de una bebida al día y en hombres no más de dos al día.
El alcohol te da calorías, pero no nutrientes
Si alguna vez has escuchado el término de “calorías vacías” he aquí un perfecto ejemplo. El alcohol te proveerá de calorías, pero no de nutrientes. Es decir, te aportará energía que al final del día si no la gastas se traducirá en grasa acumulada, pero no recibirás proteínas o mucho menos vitaminas o minerales.
Mételo en tu conteo calórico
Si vas a beber alcohol, sobre todo cuando tratas de reducir tu consumo de calorías, es necesario lo contemples dentro de tu recuento de estas para que no termines excediéndote, ya que vas a sustituir calorías provenientes de otros alimentos más saludables que sí aportan más saciedad, a diferencia del alcohol que no tiene esas características.
Si eres hombre llevas las de perder
Hay estudios que demuestran una asociación positiva entre beber alcohol y la ganancia de peso, pero esto se ha evidenciado más en hombres que en mujeres.
Evita la cerveza
La ciencia confirma que existe una relación positiva entre beber cerveza y la obesidad abdominal, o sea la acumulación de grasa visceral, que es la que se ubica alrededor de tu estómago. En teoría, la cerveza no te hace ganar tanta grasa de forma generalizada en todo el cuerpo, excepto por la panza.
Escoge sabiamente tu bebida
El alcohol se podría considerar prácticamente como si fuera azúcar (aunque específicamente no lo es), por lo tanto, evita tomar bebidas que agreguen más de esta a tu vida: refresco de cola, jugos industrializados, bebidas energizantes o hasta agua tónica.
No te olvides de la comida
Es típico que si vas a salir a cenar, de fiesta o a echar trago con tus amigos, sería muy poco probable que escojas una ensalada para acompañar tu bebida. Ahora bien, debes considerar no incluir en este momento alimentos ricos en grasa o aquellos que tienen demasiados carbohidratos simples.
Hidrátate antes, durante y al final
Y te aseguramos que si te da cruda esta disminuirá o tal vez ni la padezcas. Esto también beneficiará el control que tienes sobre tus alimentos, ya que tus antojos serán menores y tal vez hasta escojas una mejor calidad en tus alimentos y no te vayas solamente por lo grasoso o lo picoso.
Alterna tus bebidas
Bebe agua u otras bebidas bajas en calorías o no alcohólicas entre aquellas que contienen alcohol. De esta forma, no te pasarás toda la velada metiendo innecesariamente calorías vacías al cuerpo.
No te brinques comidas para ahorrarte calorías
El punto es no dejes de comer por completo si ya sabes que beberás alcohol un día. En cambio, busca que ese día tu alimentación sea lo más sana posible, de esta forma no llegarás hambriento y comerás de más en tu evento o al menos, no tendrás muchas ganas consumir comida chatarra.
Engaña a tu mente
Es común que cuando sales a restaurantes o bares, las porciones de las bebidas son mayores a las porciones estándar; entonces, aparte de buscar las bebidas más bajas en calorías, puedes tomarlas en vasos más pequeños. De esta forma, sentirás que consumes bebidas más veces.
Aprende a rechazar y decir no
Tan fácil como proponerte de conductor designado. De esta forma puedes beber, pero no excesivamente (si eres de los que no saben decir no y eres débil para hacer que esto se respete).