La alta cosmética llegó al ámbito de la pintura industrial y de interiores. Esta propuesta nos presentó la campaña «Antiaging» de Pinturas Proa, desarrollada por la agencia BAP&Conde.
Tiene un doble propósito: desafiar los estereotipos alejándose de las opciones convencionales y comunicar que el mundo de la belleza abarca mucho más que el embellecimiento de personas. Esta campaña también se encarga de embellecer las cosas en su entorno.
«Antiaging» se basa en la premisa de que, de la misma manera en que un maquillaje de alta calidad o un lápiz labial excepcional pueden transformar un rostro fatigado o envejecido, las pinturas y barnices de Proa, una marca gallega con más de 80 años de experiencia en la producción de pinturas de excelencia, devuelven la belleza a los muebles y las paredes, rejuveneciéndolos con productos de primera categoría.
La estrategia concebida por BAP&Conde se inspira en conceptos propios de la industria de la belleza, tales como rejuvenecimiento y efecto protector, así como en técnicas de lujo y exclusividad relacionadas con la estética.
«Empleamos elementos característicos del vocabulario de la cosmética de lujo para moldear nuestra estrategia», explican desde BAP&Conde, y el resultado se hace evidente. Las imágenes de atractivos rostros femeninos y masculinos, semejantes a las distinguidas firmas francesas, proyectan un aura de bienestar. Aquí, el mundo de la belleza se eleva al más alto nivel, donde los productos Proa «rejuvenecen cualquier objeto» o «protegen cualquier superficie de los efectos del sol».
Esta campaña, que se despliega en plataformas de redes sociales, tiendas, revistas especializadas y mercados virtuales, introduce el primer enfoque de belleza aplicado a la pintura antiaging. Enfatiza la idea de embellecer caras a través de pinceladas, ya que estas se vuelven «más hermosas» y demuestran que los tratamientos de belleza no se limitan exclusivamente a las personas.
